La sala de exposiciones del centro cultural municipal de Santa María la Real de Nieva acoge hasta el domingo 11 de febrero una exposición de aguafuertes sobre el esgrafiado segoviano realizados por el ingeniero Justino Santos, organizada por el Consistorio de la localidad y la Diputación Provincial.
El presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, y el alcalde de Santa María la Real de Nieva, Jaime Pérez, han inaugurado esta tarde la muestra que se podrá visitar de lunes a viernes de 16.00 a 19.00 horas y de 11.00 a 13.30 horas.
En el acto han estado también presentes los diputados provinciales Jesús Yubero y José Antonio Sanz, alcaldes de Sangarcía y de Martín Muñoz de las Posadas; los alcaldes de Jemenuño, Paco Calle; Villoslasda, Esteban Martín; Tabladillo, Lorenzo Sanz; Miguel Ibáñez, Fernando Yagüe; Sangarcia, Jesus Yubero; Codorniz, Domingo Tinaquero; Paradinas, Carlos Martín; Juarros de Voltoya, MIguel Ángel Marugán; y Miguelañez, Frutos González; la teniente alcalde de Santa María la Real de Nieva, Pilar Ares, y el concejal de la misma corporación, Francisco Ruano.
Los 35 cuadros que componen la exposición pertenecen al fondo artístico de la Diputación, pues Justino Santos decidió donárselos a la institución provincial tras la celebración hace unos dos años de la muestra "Encajes de cal y arena. Grabados de Justino Santos" en el Patio de Columnas del Palacio Provincial.
Emigrante en el País Vasco, Justino Santos, ingeniero jubilado, volvió hace unos años a su Navas de Oro natal, y se dedicó desde su vuelta a este proyecto. Quienes se acerquen a Santa María la Real de Nieve podrán ver 35 placas en las que recoge un motivo de esgrafiado, y la estampa del edificio en el que uno puede encontrárselo. Están realizadas con diversas variantes del aguafuerte, del aguatinta, de la xilografía y del fotograbado, a través de las cuales el artista hace un recorrido por hitos históricos de este revestimiento mural, seña de identidad de la arquitectura segoviana.
El proyecto llevaba en la mente de Justino Santos desde hacía veinte años, cuando, haciendo de anfitrión y guía para un grupo de montaña de Guecho (Vizcaya) por Segovia, la curiosidad y admiración de sus integrantes hacia las fachadas de la ciudad, acabó por convertir al esgrafiado en el protagonista de aquella visita: "Los detalles y comentarios de aquel día –ha declarado- quedaron grabados en mi subconsciente y sin duda sirvieron para que, andando el tiempo y reflexionando sobre las posibilidades de la técnica del grabado calcográfico, asociara esta técnica a la del esgrafiado y me planteara llevar a cabo lo que ahora muestro en esta exposición".
Aspectos comunes
Fue así como Justino Santos acabó por encontrar entre grabado y esgrafiado diversos aspectos comunes, tales como el efecto multiplicador, el uso de instrumentos punzantes, etc., lo que le llevó a unirlos en esta experiencia que trata de difundir el rico patrimonio de los esgrafiados de Segovia capital y provincia. Así, pueden contemplarse en la exposición, las diferentes vertientes del esgrafiado medieval en señeros edificios como el Torreón de Lozoya, el Castillo de Coca, la Torre de Árias Dávila, la Casa de los Peces o el interior de la Iglesia de la Vera Cruz. Al periodo renacentista corresponden las piezas dedicadas a las galerías del Torreón de Lozoya y al Arco de la Canonjía, en tanto que del periodo barroco se muestran realizaciones tan interesantes como la dedicada a una fachada de la localidad de Sangarcía. Por último, a tiempos recientes corresponden la mayor parte del resto de estampas, algunas de gran singularidad como el reloj de sol que diseñara el arquitecto José Miguel Merino de Cáceres en 1967.
Pero la exposición no es sólo evidencia de la riqueza del esgrafiado segoviano a través de su historia y su variedad ornamental; Justino Santos propone en paralelo un recorrido emocional por una de las esencias de lo segoviano, dirigido a los sentimientos y a los afectos. "Su arte, por más que sea descriptivo, no es puramente mimético, y en sus manos el esgrafiado se transforma de motivo de inspiración en motivo inspirador", apuntó Rafael Ruiz, de quien dijo Justino Santos que le habíaaportado "consejos muy necesarios para cualificar el proyecto".